En un espléndido y soleado día salieron los cachorros de ocelote con sus camisetas de Liceo Naval a visitar los jardines de la poderosa y numerosísima familia SIC
Y se propusieron jugar al Rugby.
Advertido el coach Marcelo de que los zanjeros plantearían un esquema de “juego moderno” organizó sus equipos para enfrentar esta amenaza.
En la cancha en que estuvo este cronista se vió al team liceísta adaptarse casi milagrosamente a esta modalidad de juego, ya que las individualidades casi inmediatamente hicieron sus propios trys. Una vez más tranquilos,comenzaron a divertirse y a hacer pases entre ellos, tanto en ataque como en defensa mostrando un lindo juego de equipo
Se destaca la voluntad y habilidad de los chicos para hacer soberbios tackles y corridas en defensa que anulaban a los jugadores del SIC.
Algunas indecisiones en la obtención de pelotas ,producían cierta desorganización en los chicos, pero una vez con la pelota en la mano inmediatamente corrían al ingoal rival
resolviendo con pases y apoyos definitorios.
Los locales cambiaron varios equipos, pero los resultados fueron similares. Una muy buena demostración de las pequeñas uñas que comienzan a mostrar los cachorros y que auguran futuras buenas actuaciones de este cada vez mas numeroso grupo de amigos.
Creo que muy auspicioso el hecho de haber jugado en la Zanja, sin inhibiciones y con mucha voluntad.
El Cronista Secreto.
Y se propusieron jugar al Rugby.
Advertido el coach Marcelo de que los zanjeros plantearían un esquema de “juego moderno” organizó sus equipos para enfrentar esta amenaza.
En la cancha en que estuvo este cronista se vió al team liceísta adaptarse casi milagrosamente a esta modalidad de juego, ya que las individualidades casi inmediatamente hicieron sus propios trys. Una vez más tranquilos,comenzaron a divertirse y a hacer pases entre ellos, tanto en ataque como en defensa mostrando un lindo juego de equipo
Se destaca la voluntad y habilidad de los chicos para hacer soberbios tackles y corridas en defensa que anulaban a los jugadores del SIC.
Algunas indecisiones en la obtención de pelotas ,producían cierta desorganización en los chicos, pero una vez con la pelota en la mano inmediatamente corrían al ingoal rival
resolviendo con pases y apoyos definitorios.
Los locales cambiaron varios equipos, pero los resultados fueron similares. Una muy buena demostración de las pequeñas uñas que comienzan a mostrar los cachorros y que auguran futuras buenas actuaciones de este cada vez mas numeroso grupo de amigos.
Creo que muy auspicioso el hecho de haber jugado en la Zanja, sin inhibiciones y con mucha voluntad.
El Cronista Secreto.
